domingo, 30 de junio de 2019

El rosa solo es un color

El muchacho había vuelto otra vez del colegio con un moratón en la cara. Era triste que por su forma de ser recibiese cada poco algún insulto e incluso, como hoy, algún golpe. Obviamente al niño le dolía todo aquello, pero parecía que, pese a todo, le iba haciendo más fuerte. Él se veía distinto en algo a la mayoría aunque por dentro se reconocía igual que al resto, tenía sentimientos como todo el mundo: reía, lloraba, tenía frío en invierno y calor en verano, hambre cada pocas horas... Igual que los demás. Pero para una parte de esos demás no lo era, y cuando no recibía de unos, lo hacía de otros.

Como siempre al volver del colegio la madre le había preparado su vaso de leche con galletas y deambulaba entre la cocina y el cuarto de estar evitando hurgar aún más en la llaga. Sabía porqué su hijo volvía muchos días triste y el golpe de la cara lo hacía más evidente. El niño tomaba despacio sus galletas mojándolas en la leche, cabizbajo, sin hablar. Cerca del niño se encontraba el abuelo que tampoco decía nada. Hacía como que leía el periódico pero miraba por encima del diario al nieto, sabía de su sufrimiento. Un hombre recio, curtido, de campo y lleno de ira por el dolor del muchacho. Le gustaría presentarse en el colegio y moler a palos a los responsables pero así no se solucionaban los problemas, así que dejó que el tiempo pasase y su nieto se tranquilizara. Tras un rato de silencio el niño se dirigió al abuelo sin dejar de mirar su vaso de leche, como si la solución a sus problemas estuviesen en él:

—Abu ¿a ti te gusta el rosa?

El abuelo tragó saliva a sabiendas de la importancia de la pregunta y se tomó unos segundos antes de responder mientras el niño seguía con su vaso de leche. Finalmente, el anciano, bajó su periódico y miró directamente al chaval:

—Hijo, el rosa solo es un color.

El niño meditó la respuesta y lentamente giró su cabeza hasta que los ojos de nieto y abuelo se encontraron. Una tímida sonrisa fue apareciendo en la cara del niño, sabía que siempre podría contar con su Abu..